El sitio arqueológico Fuerte Quemado, vecino a Santa María en los Valles Calchaquíes de Catamarca, expone al turismo la riqueza arqueológica e histórica de las culturas santamariana, de Belén y San José, y la mezcla de los estilos arquitectónicos de los incas y de la colonia.
Este sitio es uno de los atractivos turísticos catamarqueños más visitados durante todo el año, y lo fue en especial durante las recientes vacaciones de invierno, según datos de la Secretaría de Turismo provincial.
Fuerte Quemado, el último poblado del norte de Catamarca, en el límite con Tucumán, a 11 kilómetros de Santa María y con solo 500 habitantes, atesora en un cerro vestigios entre los que se destacan los del imperio incaico y muestras de las artesanías de las primeras poblaciones de esa zona.